
Serie
CONSCIENCIA
SUMARIO
Inspirada en la obra de Piet Mondrian Composición con plano rojo grande, amarillo, negro, gris y azul (1921).
Marzo 2019

Maderas de Pao Ferro, Wengué y Palo Rojo.
100 x 100 x 100 cm
71,2 Kg
Cubo INSPIRATION
Inspirada en la obra de Antoni Tàpies, Grande Équerre (1962).
Marzo 2019

Maderas de Pao Ferro, Wengué y Palo Rojo.
100 x 100 x 100 cm
75,3 Kg
Cubo INSPIRATION III
Inspirada en la obra de Antoni Tàpies, Grande Équerre (1962).
Abril 2019

Maderas de Pao Ferro, Wengué y Palo Rojo.
100 x 100 x 100 cm
87,5 Kg
Cubo APARIENCIAS
Inspirada en las obras de Josef Albers.
Marzo 2019

Maderas de Pao Ferro, Wengué y Palo Rojo.
100 x 100 x 100 cm
76,1 Kg
Cubo CONFUSION
Inspirada en la obra de El Bosco, El jardín de las delicias (1500-1505).
Marzo 2019

Maderas de Pao Ferro, Wengué y Palo Rojo.
100 x 100 x 100 cm
95,8 Kg
Cubo SPRING SPIRIT
Inspirada en la obra de Sandro Botticelli, La Primavera (1481).
Marzo 2019

Maderas de Pao Ferro, Wengué y Palo Rojo.
100 x 100 x 100 cm
66,0 Kg
Cubo STABILITY
Inspirada en Mujer en la ventana, de Friedrich (1822).
Marzo 2019

Maderas de Pao Ferro, Wengué y Palo Rojo.
100 x 100 x 100 cm
87,0 Kg
Cubo INNOVATION
Inspirada en "El caminante sobre el mar de nubes", de Friedrich (1818).
Mayo 2019

Maderas de Pao Ferro, Wengué y Palo Rojo.
100 x 100 x 100 cm
53,0 Kg
Cubo OCÉANO
Inspirada en Monje a la orilla del mar, de Friedrich (1808 - 1810).
Mayo 2019

Maderas de Pao Ferro, Wengué y Palo Rojo.
100 x 100 x 100 cm
54,3 Kg
Conversaciones
sobre arte, comunicación y
#conciencia
De “lo usable” a “lo observable”
En febrero de 2019 doy por superada mi etapa de “lo usable” y me adentro en experiencias para la observación. Sin dejar los conceptos principales de mi comunicación y la simbología, me centro en la creación de formas, volúmenes y espacios para ser observados “desde otros puntos de vista”, “desde diferentes puntos de vista” y “desde las realidades que crea la luz”.
- Ernesto Oñate
Liderar un arte útil
De nuevo un arte nuevo: un arte útil.
La obra artística ha de ser guía que conduzca, por la vía de la bondad y la verdad, el diseño de la comunicación y de los productos de consumo. El artista ha de liderar las voluntades de la creatividad y del buen hacer.
Un arte por el arte y la dignidad de este.
La obra artística, leal a su propio valor intrínseco, ha de ser:
-intención de fascinar y conmover los sentimientos más elevados.
-musicalidad en sus proporciones, eurítmica en su composición y armónica en sí y en la relación con su entorno.
-pieza única producto del mimo del artista en su proceso de construcción.
Un arte que conjuga intuición y reflexión.
La obra artística se gesta desde el amor y el desconocimiento del miedo. Nace en la imaginación, el artista la busca confiado en su intuición y la creación tiene lugar con la inspiración. La experiencia del artista, su reflexión desencadenante de emoción, le conduce a la perfección.
Un arte que induce conocimiento y crea emoción.
La obra artística ha de ser: vehículo de ideas, o contenedor de una narrativa, y el punto de apoyo y la palanca capaz de mover en el espectador la emoción que el artista vive en el momento de la creación.
Un arte que no condena y sonríe a la sonrisa.
La obra artística ha de ser respuesta a los valores que ennoblecen al ser humano, que elevan a la persona a los niveles de unicidad con nuestros semejantes, nuestro entorno y el planeta.
Un arte que no quiere ser la solución de nada, pero sí abrir caminos hacia la verdad.
La obra artística ha de ser expresión del sentimiento de su autor, desde su realidad y por tanto desde su verdad personal, desde su conciencia democrática y participativa en el bien común.
Un arte que no lucha contra lo que nos avergüenza, sino que ensalza lo que nos enorgullece.
La obra artística, como el medio de comunicación más sublime, debe utilizarse para ennoblecer, enriquecer y deleitar el alma y contribuir a la felicidad.
Un arte que sirve de guía al objeto de consumo, para que el consumo no nos avergüence.
La obra artística ha de ser modelo y referencia para el objeto de consumo cotidiano.
El objeto cotidiano, como reflejo del arte ha de cumplir las mismas tres funciones inmutables que la obra artística:
-función comunicativa, para trascendiendo su vacuidad sea un medio de transmisión de verdad y comprensión.
-función simbólica, para que trascendiendo su materialidad se revista de simbología como medio de expresión.
-función estética, para que trascendiendo su funcionalidad sea un elemento para el deleite, con música propia y armonía con su entorno.
También, cualquier otra función que le añada valor comunicativo, entre otras:
-función pedagógica, que sea camino hacia la verdad.
-función ideológica, que ensalce los valores de nuestro mundo global.
-función crítica y de superación, que se haga eco de las transformaciones sociales.
-función conmemorativa, que sea memoria de los avances hacia una sociedad humanizada.
-función de promoción, que ensalce logros personales.
- Ernesto Oñate